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Museo de la Plaza de Toros

20 agosto, 2018

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Hay un dicho popular que asegura que “la Historia de la Real Maestranza, es la propia historia del toreo” porque por su albero han pasado las mejores figuras que ha dado este País y que escribieron con tinta de oro las mejores corridas de la Tauromaquia.  De Manuel Jiménez Moren o “Chicuelo” a Pepe Luis Vázquez, De Manolete a José Tomás, De Morante de la Puebla a Curro Romero y así una larga lista de hombres con talante y estilo.

El Museo fue inaugurado por los Príncipes de Asturias el 5 de Abril de 1989 en un acto presidido por la Condesa de Barcelona.  Su entrada se sitúa anexa a la Puerta del Príncipe, famosa por ser la que usan los toreros triunfadores para salir a hombros.

Las colecciones de la sala se distribuyen en a lo largo de cuatro salas temáticas:

  • La primera sala se centra en la vinculación de la propia Corporación con las fiestas taurinas. Se exponen las obras más antiguas como por ejemplo un cartel del año 1740. Podemos practicar los juegos caballerescos que datan de los siglos XVII y XVIII por la nobleza, ver representaciones de antiguos trabajadores de la plaza del siglo XVIII, como timbaleros o lanceros, y un uniforme de maestrante donado por Don Carlos de Borbón Dos Sicilias y de Borbón.
  • En la segunda sala encontramos todas las obras pictóricas de la etapa del “Toreo a pie”, con piezas del  siglo XIX. La más importante es “Cogida de muerte de Pepe Hillo” del artista Eugenio Lucas Velázquez, discípulo de Goya.
  • En la tercera sala encontramos todas las piezas enclavadas en la Edad de Oro de la Tauromaquia, donde dos figuras sobre salen frente a las demás: Juan Belmonte y Joselito “El Gallo”.
  • Por último, en la cuarta planta se conserva la colección más actual. Cabezas de toro disecadas, capotes y trajes de luces, y pinturas de artistas actuales.

El Museo Taurino encierra estatuas de bronce de toreros de todas las épocas, y obras pictóricas que hablan de la historia de la Fiesta Nacional, como el retrato de Fernando VII por José Gutiérrez de la Vega, rey que apoyó el toreo e incluso fundó la Real Escuela de la Tauromaquia de Sevilla.  Otro de los tesoros que custodian sus muros es uno de los primeros trajes de luces que utilizó Joselito cuando cumplió 14 años. Además de otros objetos curiosos como los que se utilizan para la lidia, garbados y azulejos, o la cabeza de la madre (Islera) del toro que mató a Manolete
En la colección que recoge el Museo de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla se aprende a apreciar el respeto al Toro Bravo, y se respira la pasión por la historia de un arte que va vinculado a las tradiciones más puras de esta tierra: la tauromaquia.

Localización

El Museo de la Real Maestranza de Sevilla se sitúa en una zona privilegiada de la ciudad. Con el río Guadalquivir y la Torre del Oro custodiándola, el edificio del siglo XIX se encuentra ubicado en el Paseo de Cristóbal Colón, una de las avenidas principales de Sevilla.

Información

 

Dirección:  Paseo de Cristóbal Colón, 12, 41001 Sevilla

Horario:
9.30 – 19.00 H. (del 1 de noviembre al 30 de abril)
9.30 – 20.00 H. (mayo y octubre)
9.30 – 23.00 H. (del 1 de junio al 30 de septiembre)

Precio:
Entrada 7 €€
Mayores de 65 años, pensionistas y estudiantes 4€
Niños de 0 a 6 años, gratis y de 7 a 11 años 3€
Para grupos, consultar.
Los lunes de 15.00 a 19.00 H. la entrada es gratuita.

Teléfonos: 954 210 315  –  954 224 577  –  954 221 490
Web: http://www.realmaestranza.com/


Historia

La Historia de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla se remonta al siglo XVII, concretamente a 1733, cuando fue construida en madera en el monte del Baratillo (también se la conoce como el Coso del Baratillo).

Fue la primera plaza que se construyó con forma ovalada y la más antigua de toda España; por ese motivo se considera la plaza con más tradición taurina; y se ha ganado el apodo popular de la “Catedral del Toreo”.

Gracias al estilo tardo-barroco que la caracteriza se sitúa como una de las plazas más hermosas de España. La entrada principal, custodiada por dos torreones, es uno de los edificios principales de la ciudad y una de las atracciones turísticas más visitadas.

Reformada en 2008 por última vez, su capacidad es de algo más de 12.500 localidades.

El Museo, sin embargo, fue una incorporación muy posterior. Inaugurado en 1989, la misión de este espacio es invitar a los visitantes y amantes de los toros a conocer la historia de la Fiesta Nacional a través de un recorrido donde podrás ver una colección pictórica, carteles taurinos, azulejos, bronces y esculturas de figuras destacadas como la de Mariano Benlliure.

La Plaza

La Real Maestranza de Caballería de Sevilla tiene forma (tanto interior como exterior) de polígono irregular de 30 lados desiguales, consecuencia de las numerosas obras realizadas a lo largo de 120 años de historia.

Como mencionamos anteriormente, el estilo del edificio es tardo-barroco, propio de la mitad del siglo XVIII, en el que se empiezan a apuntar rasgos del neoclasicismo también característico de este siglo. La puerta principal está franqueada por dos torreones, que le otorga monumentalidad y gracia. A través de ella se puede acceder a los palcos y a la zona de las autoridades.

La Real Maestranza se estructura alrededor de tres anillos:

  • En el primer anillo, que se sitúa rodeando del ruedo, se encuentran las zonas del tendido y las barreras. Bajo ellas (en la planta baja) podemos encontrar algunas zonas habilitadas para uso público o para almacenamiento. En esta zona, bajo los tendidos 10 y 12, se sitúa el Museo Taurino.
  • En el segundo anillo, se sitúan los tendidos en una parte, divididos en dos gradas (alta y baja), y por otro lado la zona de servicios de la plaza: la cuadrilla, la enfermería, los corrales, el desolladero, etc.  Las grada se divide en 12 tendidos:
  • Cuatro al Sol (8-10-11-12)
  • Cinco a la sombra (1-3-5 y 2-4)
  • Dos de sol/sombra (6-9)

Dentro de cada uno de estos tendidos encontramos a su vez, de forma vertical y en barrera, tendido, palcos y gradas. Los tendidos pares se encuentran a la derecha y los impares se encuentran a la izquierda del Palco Real que preside la plaza (sobre la Puerta del Príncipe).

Hay que destacar todo el conjunto de arcos que corona la Plaza y que se sitúa sobre los tendidos, formada por 118 arcos. El más destacado de todos es el que se encuentra en el “Balcón del Reloj” sobre la puerta de toriles, que está rematado en piedra.